Crítica. WHITESNAKE – “Flesh & Blood” (2019)

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Repasamos en esta reseña el decimotercer álbum de Whitesnake que con el nombre “Flesh & Blood” será publicado el 10 de mayo de 2019 a través de Frontiers Records.

Se ha hecho esperar este “Flesh & Blood” de Whitesnake. Por motivos todavía no muy claros se retrasó la publicación del álbum que por fin tenemos entre nuestras manos y que a continuación de relatamos.

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En primer lugar y como aviso decir que, si alguien está esperando un “Slip of the Tongue” o algo parecido, lo mejor es que deje de leer esto porque seguramente no me lo va a perdonar. Creo que todos somos conscientes de la evolución de Whitesnake a lo largo de los años, y de las limitaciones que han ido cayendo sobre su lider David Coverdale… Pues bien, en este álbum todo esto, es mucho más evidente. De hecho, no quiero volver a hablar del tema de la voz hasta el final de esta reseña para evitar ser repetitivo y abundar de forma excesiva en lo fácil.

Entrando en materia lo primero que debo decir tras unas cuantas escuchas es que el álbum en general no me ha gustado. Tenemos 13 temas mezclados en un salpicón que da la sensación de haber sido compuesto y grabado en tiempos y lugares muy distintos. 

Vamos entonces a ver el menú que nos ofrece el chef Coverdale en esta nueva entrega de Whitesnake.

Entrantes («Los quiero y no puedo»)

Como entrante desde una primera escucha es fácil darse cuenta que Coverdale ha buscado en ciertos temas revivir éxitos del pasado no solo utilizando la misma fórmula, sino que tratando de replicar temas muy concretos. Es el caso de “Always Forever” donde encontramos un “Guilty of Love” o “Straight for the Heart” venidos a menos, o en “Heart of Stone” que nos brinda ese blues pesado muy de la casa, pero donde los dejes a “Crying in the Rain” son brutales.

Primeros («Si no estuvieran nadie se daría cuenta»)

Entrando en los platos más contundentes encontramos una serie de temas con melodías planas en las que el trabajo de Beach y los coros salvan en cierto modo los cortes. Este es el caso de “Good to See you Again” tema que abre el disco, o “Gonna be Alright” que es la siguiente pista y sigue en esta línea plana e indefinida que no termina de arrancar. “Get Up” también caería en este pack, pero no por culpa de la composición, ni de la base instrumental… “Sands of Time” cierra el disco y también este grupo de las planas, aunque el trabajo instrumental de nuevo se merece algo más.

Platos Principales («Los rescatables»)

Llegamos ahora a los platos principales hablando de las más canciones rescatables del álbum entre las que tenemos el primer single y vídeo “Shut up and Kiss me”, divertido animado e incluso coreable. En este pack de los buenos meto también “Hey You (You Make Me Rock)” que personalmente considero el mejor corte del álbum donde encontramos equilibrio entre base instrumental y voces por fin nos invita a cantar y nos arranca un ¡Heyyyy! ¡Youuuuu! Otra más de estas molonas: “Well I Never”, esto si suena a Whitesnake. Y por último metería también “Trouble Is Your Middle Name” aunque de vez en cuando me da ganas de cantarme el “Whole Lotta Rosie” y el tema que da título al álbum “Flesh & Blood” que no es para volverse loco, pero si es rescatable.

Postre («Un dulzor amargo»)

Dentro de este menú compuesto por tan diferentes cocinas, llegamos al postre, y esta vez no es especialmente dulce, por más que lo intente el amigo Coverdale poniendo azúcar, sacarina y todo lo que ha encontrado en su despensa musical. Liderando esta sección nos encontramos la balada “When I Think of You (Color Me Blue)”, simplona, no digo más. ¿Y qué c… es esto de “After All”? Te coges un riff acústico aleatorio del GarageBand y empalmas 4 o cinco rimas fáciles dedicadas a tu amor, o a tu hijo y listo, ya tienes tema.

Café Tertulia («Se abre la veda»)

¡Que no se nos olvide el café! Porque llegamos al tiempo de tertulia o de terapia según cada uno prefiera. “Flesh & Blood” como álbum va bastante justito, y de hecho está entre los peores lanzamientos de la banda para mi gusto. Si algo lo salva es el trabajo de las guitarras y de los coros, porque la voz de David Coverdale está muy muy justa y las composiciones son de todo menos originales.

Creo que una banda debe saber cuándo retirarse, hemos visto como los directos han ido degenerando en estos últimos años, y ahora podemos ver esto mismo plasmado en un álbum. Me duele decirlo, pero creo que esté álbum grabado con otra voz, podría ganar muchos enteros, porque ya ni siquiera soy capaz de detectar esa personalidad de Coverdale. Va forzado hasta cuando no es necesario y es el culpable del aplanamiento de muchas fases del disco sin mencionar esas disonancias que aparecen por momentos donde da la sensación de haberse comido a David Bowie.

Reseña de Oscar Ricoy

Lista de temas de “Flesh & Blood”

  1. Good To See You Again
  2. Gonna Be Alright
  3. Shut Up & Kiss Me
  4. Hey You (You Make Me Rock)
  5. Always & Forever
  6. When I Think of You (Color Me Blue)
  7. Trouble Is Your Middle Name
  8. Flesh & Blood
  9. Well I Never
  10. Heart Of Stone
  11. Get Up
  12. After All
  13. Sands Of Time

 

Formación WHITESNAKE – “Flesh & Blood”

David Coverdale: Voz

Reb Beach: Guitarra

Joel Hoekstra: Guitarra

Michael Devin: Bajo

Tommy Aldridge: Batería

Michele Luppi: Teclados

  1. Menuda mierda de disco.Ya estoy hasta la…. de las cancioncitas de amor del señor Coverdale y sus postureos de hairmetal macho-melasfollotodas de los 80.Mis más siceros respetos a los grandísimos Tommy,Reb y Joel (Mr D.C. siempre se ha rodeado de los mejores músicos, no cabe duda) pero la composición del disco es muy mala y repetitiva (lo mismo de siempre pero mucho peor).Gran disco el «The Purple Album».

  2. En general, y por desgracia, estoy de acuerdo con el sentir general de la crítica, sobre todo la referente a la voz de Coverdale. Por Dios que mal canta a lo largo de todo el disco, que tiene muy buenas guitarras y buenos solos aunque le sobran 2 o 3 canciones.
    Con otro cantante, y esto sí que nos duele a los que amamos Whitesnake, sin duda podría haberse sido un buen disco.
    Una verdadera lástima.
    Y he leído muchas críticas muy benevolente y poco objetivas, exceptuando la de este blog…

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