Andaba uno despistado en el noble arte de contar batallitas y el sábado 24 en Sanse, un buen amigo me retornó a la arena. Este amigo tiene el arrojo de hablar con buena pluma de bandas buenas, con título oficial. Esas bandas con cartel y caché: Esas bandas molonas que la rompen. Admiro su trabajo y reconozco el tiempo y la dedicación. Sin más. Con un par.
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Pero esta vez el cronista era el sujeto escrito de pluma ajena. Decir que el que suscribe no tiene capacidad para florituras técnicas, pero algo se me ocurrirá. Soy más de sensaciones: Al lío
Con mi “negra” calada (primera vez que la enfundo desde su adquisición) me acerqué a Sanse para ver en La Nota Rock a LOUD BAND, grupo al cual, siendo sincero no conocía. Acudía semi virgen (sabía su faceta versionadora) y sordo al respecto del estilo que iba a escuchar. A veces ir sin juicios de valor ayuda, en serio.
Como todos los conciertos se ha de entrar ya con el punto (sordo iba y ciego salí) y que mejor que compartir risas y birras con la banda. Todos cercanos y con buen rollo. Tras la ingesta inicial ya solo faltaba la descarga.
Como buena banda de rock se ha de cumplir que suene de fondo ese TACA TACA TACA TACA TOCOTOM!!!! Tan guitarrero sonido que diferencia la buena música del resto. Said and done! Primer filtro logrado. Bien por ellos.
De las canciones propias decir que me gustaron por su estilo fresco y rápido, que el cantante se encargaba de adornar con sus trazas de frontman. A moverse tocada. Bien secundado por cuerdas y un gran batera, el único desconocido para mí. Necesito una segunda escucha para poder acompañar al grupo ya que era todo novedoso. Lo pongo en pendientes para la segunda entrega.
De las versiones, sin duda para mí el Holly Diver fue la más correcta en cuanto a sonido. Ronnie James Ape marcando el tempo. Casi perfecta. Las otras dos, un peldaño por debajo quizás aunque a buen nivel.
Pero la buena noticia es que son más grandes con lo propio que con lo ajeno y que sudé la negra de nuevo. Les animo a tener sello propio una vez echados a rodar. Ampliar repertorio es lo que les toca ya que la afición va en aumento.
Prueba superada y el cronista alzó la voz. Esta vez la banda molona era la suya y bien merecen futuras crónicas de gente “especializada” que les empujen a seguir aumentando familia de LOUDNERS.
Lo dicho, chavales. Bienvenidos de nuevo!!!!
El que suscribe
