Con pasión, dedicación y una visión singular, “Erebos” nos ofrece la posibilidad de disfrutar de la grandeza de VENOM PRISON
En una primera impresión, la banda originaria de Gales VENOM PRISON no resulta tan llamativa como cuando escuchas en plenitud su último disco «Erebos». Este trabajo posee una portada nada indiferente y un sonido fulgurante y opulento. Menuda impresión me he llevado con esta banda.
Desde que el género femenino ha incursionado en el Metal Extremo me ha agradado e interesado con creces y no menosprecio las que lo hacen en el Power Metal, pero las que surgieron en el Death Metal Melódico son un portento, se me viene a la memoria Angela Gossow, ex-cantante de ARCH ENEMY, su continuidad Alissa White-Gluz, la cantante griega Vicky Psarakis de la banda canadiense THE AGONIST o Tatiana Shmaylyuk de los ucranianos JINJER. Todas admirables y grandiosas, y ahora me atrevo a incluir en esta creciente lista a Larissa Stupar de VENOM PRISON.
El progreso saliente en los medios y ámbitos especializados de la banda VENOM PRISON ha sido dinámico e impresionante. Formados en Gales del Sur en el año 2015, lanzan su EP debut «Defy The Tyrant» apenas un año después, revelando su vicioso estilo pero con una versión polifacética de la brutalidad moderna. Astutamente firmado por PROSTHETIC RECORDS.
Posteriormente llegaría su el álbum debut en el año dos mil dieciséis llamado, «Animus», con su seguimiento después de tres años, «Samsara», obtuvieron alabanzas muy favorables por parte de quienes adquirieron su música y de los entornos por donde circularon, mientras que en sus despiadadas presentaciones en vivo obtuvieron grandes críticas y admiraciones, compartiendo escenario con grupos como TRIVIUM, CODE ORANGE o POWER TRIP. y participando en festivales como BLOODSTOCK OPEN AIR, BRUTAL FEST y el nacional RESURRECTION FEST.
Asimilando tantas experiencias que han dado como resultado, el lanzamiento del tercer larga duración, «Erebos», que es el Dios griego personificación de la oscuridad y la sombra, según la alegoría de deidades. Auspiciados por CENTURY MEDIA RECORDS, está destinado a ser uno de los discos a tomar en cuenta en este año. Para demostrar desde entonces hasta ahora, niveles de ingenio musical y carisma colectivo que los empujan a la vanguardia del Metal en Europa.
VENOM PRISON está formado por los músicos, Larissa Stupar, en las voces, Ash Gray, en una guitarra, Ben Thomas, en la otra guitarra, Mike Jefferies, en el bajo y Joe Bills en la batería. En «Erebos» nos dan un ataque indómito, meticuloso pero plenamente incisivo y devastador de Metal Extremo que disputa el género con otras propuestas.
En palabras de Mr. Gray: » Todo tenía que ser más grande, mejor y más pegadizo. Hemos dicho muchas veces en el pasado que esta banda no escribirá el mismo disco una y otra vez. No se trataba de mostrar lo pesados que podemos ser. Sabemos que somos una banda pesada. Solo queríamos ser más creativos, y esta vez tuvimos el lujo de tener el tiempo de nuestro lado. El estilo distintivo de Larissa se hace aún más fuerte. Es aún más poético, aunque sigue siendo crítico con los problemas que enfrentamos en la sociedad occidental. Cuando empezamos la banda, no teníamos ninguna expectativas distintas a disfrutar de lo que amamos haciendo, escribiendo música y dando espectáculos. Nunca planeamos hacer nada como grandes recorridos o firmar con cualquier sello. El plan original siempre fue disfrutar de VENOM PRISON lo mejor que podamos y darle todo lo que se merece, nuestro tiempo, compromiso y pasión. Cuando escucho el nuevo disco y realmente pienso: ¡Sí, hemos superado nuestras ambiciones!».
Grabado y producido por el respetado y admirado Scott Atkins, «Erebos» es el sonido de una banda poseedora de una corriente llena de voluntad y autodeterminación. Una vez más el artwork del disco adornada con un exclusivos e impresionantes obra de arte del renombrado genio visual Eliran Kantor, la tercera creación es un estruendo emocionante de ingenioso salvajismo, melodías distorsionadas y tumultuosos interferencias de voces de Ms. Stupar que impresionan.
Un disco serio, espontáneo, refrendado e incontestable por el mensaje expuesto con la sociedad en la que vivimos, entregándonos melodías con una lírica que aborda temas como la migración, el feminismo, la salud mental o el límite fronterizo entre las naciones especialmente entre poderosos y débiles, temas varios congruentes y consistentes de situaciones habituales que no pueden pasar desapercibidas.
Arrancamos con el tema «Born From Chaos», un preámbulo cargado de percusiones y sonidos mecánicos con algunos gritos hilarantes, se nota la inquietud y conmociones que llegan;
«Judges Of The Underworld», los riffs despiadados de un Death Metal con una técnica desahogada, en donde la técnica es perspicaz como esos coros limpios junto a las pausas de los acordes que se tornan quietos para soliviantarse luego para un final brutal, con una imágenes del video que inquietan especialmente cuando las miradas de los protagonistas se quedan fijas en escenas espontáneas en blanco con la banda al completo;
«Nemesis», es llamativo que en el vídeo promocional nuevamente aparezca el personaje masculino rapado que antes se desquiciaba en una habitación en el anterior, pero esta vez en un espacio más amplio, un bosque donde cava su tumba ante las escenas de una bruja que se combinan con las de la banda, el primer plano de Ms. Stupar es intimidante, junto al timbre de voz y gesticulación de un corte lleno de aptitudes artísticas extraordinarias de VENOM PRISON, acontece los tempos de las tonadas que ponderan en toda la canción increíblemente, mientras que se repite la letra casi como una plegaria suplicante;
«Comfort Of Complicity», el ultimo video promocional junto a la salida al mercado de la nueva producción «Erebos», las imágenes son discretas y en el aspecto musical tenemos una consonancia de rimas y versos llenos de contorsiones de los instrumentos, principalmente la batería de Mr. Bills que con su doble kick de bombo esparce un despliegue absoluto;
«Pain Of Oizys» una balada con base electrónica y teclados que va en aumento, rompe esquemas pero sin comprometer su la personalidad de los Galeses, es todo apertura es lo que actualmente son VENOM PRISON, sensatez en las voces limpias como guturales y la estructura melodiosa es como las notas de los teclados junto a los alaridos que combinan tolerablemente, mención especial para las cuerdas de Mr. Gray y Mr. Jefferies suenan espléndidas y las imágenes del video son arte puro, su protagonista bailando y moviéndose en ese escenario litoral de un mar calmado y un cielo nublado, abiertamente fabuloso, con esa puerta abierta de su residencia para que se repita cuantas veces se desee los eventos, uno de mis videos favoritos en todos su contexto;
«Golden Apples Of The Hesperides», con un preámbulo de sintetizador electrónico que le da toque de tonadas industriales, hasta que se desencadena la banda a toda lo que da, refiriéndome a rapidez y presteza en sus entonaciones, la combinación de Thrash y Death Metal es admisible y lo personalizan aceptablemente;
«Castigated In Steel And Concrete»; armonías ascendentes de las notas graves hasta las agudas, adaptadas a la combinación de un sonido de fondo de teclados en una guitara que se torna voluminosa con cada solo que deja impronta. Nuevamente si ponemos atención los coros masculinos acompañan a los de Ms. Stupar estupendamente y cuando parece terminar retorna con un último aliento para rematar el corte, con unas secuencias rítmicas soberbias;
«Gorgon Sisters», la técnica que maneja VENOM PRISON es para ponerle atención porque crean recubrimientos de arpegios en cada estrofas que podrían darnos varias melodías dentro de una sola, fijarse en cada instrumento es una tarea que nos deja impresionados, incluyendo las voces, mientras disfrutamos de una vorágine de distorsiones, se pueden dar unas pausas aplastantes en las cuerdas para llegar a la consonancia de la placidez y tranquilidad;
«Veil Of Night»; de las cortes en donde la intensidad no se debe de subestimar, tiene otra ritmicidad con temperamento y carácter completamente equipada con todo el estilo de la banda, que nos garantiza que poco se reservan creativamente, aunque exista como un hilo conductor el incremento germina en cada acorde y estrofa, la evocación de sus actitudes y aptitudes es indiscutible;
«Technologies Of Death»», los crash de la batería secos, con un riff atractivo junto a las voces sugestivas para este último corte en donde no se restan nada que no encontremos en el resto: contundencia, energía y persuasión en la canción más minutaje del disco, seis minutos con treinta y cinco segundos, con un solo del bajo de Mr. Bills en el ecuador muy emocionante y que dará luego la consumación de forma orquestal de mucho apogeo, candoroso final.
VENOM PRISON ha hecho un álbum que refina y redefine lo que hacen en este punto de su existencia, con una pasión tan evidente por el proceso creativo en exhibición, que es una satisfacción y esparcimiento para los que contemplamos el Metal Extremo. Presumir de éxito es posible para ellos, el disco lo evidencia. Además de ser estupendos músicos, se han convertido en una de las bandas en estudio y en vivo más consistentes del medio, pero también como compositores hacen que todo se acople y trabaje en conjunto. VENOM PRISON son concienzudos y determinados, concibiendo armazones de sonidos destacados sin estancamiento alguno en su sinfonía.
Una exaltación impresionante de encarnizamiento perspicaz de melodías distorsionadas y ambientes escandalosos, «Erebos» es una declaración valerosa y determinante de una de las bandas más estremecedoras de la actualidad. Desde sus orígenes modestos y sencillos hasta su estatus indiscutible que comienza a ganarse un sitio en el firmamento del Metal Extremo, VENOM PRISON es ahora una fuerza en prolongación. Como ellos afirman: ««Erebos» realmente ha abierto nuestros horizontes como banda, haciéndonos querer ser más creativos como un todo. Para nosotros, siempre se ha tratado de evolucionar musicalmente y progresar con cada paso que damos, y eso nunca cambiará. Tenemos mucho más por explorar y estamos seguros de que somos capaces de hacerlo. La rutina debe continuar».
Del Dios Érebo se decía que sus densas nieblas de oscuridad rodeaban los bordes del mundo y llenaban los sombríos lugares subterráneos de donde se cree que se originó todo, lo primordial, lo fundamental. Este disco denominado «Erebos» posee algo de esto es básico pero crucial al mismo tiempo para VENOM PRISON que no pone límite a las abstracciones o tenebrosidades que dominan los diez cortes del disco.
Crítica de Pepe Cortez
