Crítica del último lanzamiento de Pink Cream 69 a través de Frontiers Records titulado «Headstrong»
Pink Cream 69 siempre han sido un grupo del montón. Tienen una discografía bien normalita, no tienen ninguna obra maestra, ni siquiera una canción que le suene al oyente medio de Heavy Metal clásico más allá de sus fans. Jamás han subido al siguiente nivel ni han destacado por nada… bueno sí, por ser la ex banda de Andy Deris, cantante de Helloween desde hace más de veinte años. Pese a todo, y sobre todo en los últimos años, están sacando discos que están gustando tanto a la crítica como al público, y parece que su número de seguidores ha aumentado últimamente.
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Tras la época glamourosa con Deris que duró hasta mediados de los 90, y los altibajos discográficos que han sufrido todos estos años, parece que la banda esté viviendo una segunda juventud desde aquel ya lejano “In10sity” del 2007, y sobre todo con el anterior “Ceremonial” editado en 2013. Éste “Headstrong” sería algo así como la tercera parte de una supuesta trilogía, ya que este es el tercer disco de estudio en el que toca como miembro fijo del grupo el guitarrista Uwe Reitenauer, y también es el tercer disco de estudio que editan con el sello italiano Frontiers Records, y que sirve para celebrar, además, el 30 aniversario de la banda.
La mayor diferencia entre éste “Headstrong” y los dos anteriores está en que éste tiene un sonido mucho más enfocado al Heavy clásico, mientras que los anteriores “in10sity” y “Ceremonial” eran más Hard Rockeros. La gran producción del también bajista de la banda Dennis Ward es un punto a favor. Ha conseguido hacer sonar al grupo más crudo, cañero y directo que nunca. Aquí tenemos auténticos trallazos como “We bow to bone”, “No more fear”, “Path os destiny” o “Bloodsucker” que harán las delicias de los amantes del clásico Heavy Metal 80s de bandas como Accept, con unos riffs punzantes, baterías contundentes, y clásicos solos de guitarra y melodías oídas en mil ocasiones, pero que siguen haciéndonos vibrar.
La faceta más Hard de la banda aparece en “Walls come down”, “Unite and divine“, o la que para mí es la mejor canción del disco “Man of sorrow”, mientras que en “Vagrant of the night” y “The other man” nos muestran su parte más acústica y sensible.
Como regalo hay un segundo CD grabado en directo en Ludwigsburg en 2013 en el que hacen un repaso a prácticamente toda su carrera, que está muy, pero que muy bien.
En definitiva, un paso adelante en la carrera de la banda, que a ver si de una vez por todas consigue dar el salto definitivo al gran público HardRockero europeo y americano más allá de su Alemania natal, donde tienen una enorme legión de fans.
