Repasamos el año 2025 en el mundo del rock y el metal: regresos históricos, discos imprescindibles, festivales multitudinarios, conciertos memorables y las despedidas que marcaron a toda una generación
El 2025 no ha sido un año cualquiera para quienes vivimos la música entre amplificadores y cuero; ha sido el año en el que el rock y el metal nos recordaron por qué seguimos aquí. Ha sido un ejercicio de supervivencia y de celebración, un tiempo donde los viejos himnos de nuestra vida se han mezclado con nuevas voces que ya sentimos como propias. No se ha tratado solo de notas musicales, sino de esa sensación indescriptible de hermandad al ver a leyendas que creíamos inalcanzables volver a pisar un escenario, demostrando que el fuego, lejos de apagarse, sigue quemando con una fuerza que nos atraviesa el pecho.
Ha sido un año de emociones a flor de piel, marcado por un movimiento incesante de discos que ya son banda sonora de nuestros días y festivales que se sintieron como un refugio. Pero, por encima de todo, el 2025 nos ha obligado a mirar de frente al paso del tiempo. Hemos celebrado regresos históricos con lágrimas en los ojos, mientras despedíamos con el corazón en un puño a maestros que nos enseñaron a entender el mundo a través de un riff. Ha sido un año de abrazos en el moshpit y de silencios respetuosos, una montaña rusa que nos ha recordado que, aunque las personas se vayan, la electricidad que generaron es eterna.
Las líneas que siguen no son un inventario frío ni una lista cerrada; son nuestra forma de digerir doce meses de intensidad pura. Es un recorrido emocional por los momentos que nos hicieron vibrar, las pérdidas que nos dolieron y los descubrimientos que nos devolvieron la fe en el futuro. Este es nuestro resumen de un 2025 donde, a pesar de todo, el volumen nunca bajó.
Momentos de Rock que detuvieron el tiempo en 2025
En 2025, el mundo del rock y el metal no solo se escuchó, se sintió. Estos han sido los instantes que nos pusieron la piel de gallina:
- AC/DC: Sigue el rugido de los cañones. Ver a Angus Young, con su eterna energía, liderar una gira que ha sabido a despedida y a gloria a la vez, ha sido un regalo. AC/DC ha demostrado que el rock and roll es la fuente de la eterna juventud, congregando a tres generaciones bajo el mismo hechizo de electricidad y sudor.
- Linkin Park: El renacer de las cenizas. La consolidación de esta nueva etapa ha sido una lección de resiliencia. Ver a la banda sonreír de nuevo sobre el escenario y al público abrazar a Emily Armstrong ha sido el abrazo que todos necesitábamos para cerrar una herida que llevaba demasiado tiempo abierta.
- Black Sabbath: El cierre del círculo en Birmingham. La reunión de los cuatro fundadores para un último adiós en su ciudad natal fue un momento casi místico. Fue el punto final a la historia de quienes inventaron nuestro sonido, una despedida llena de respeto, humo y gratitud eterna.
- Iron Maiden: Medio siglo de leyenda. Con su gira Run for Your Lives, «La Bestia» celebró 50 años de vida. Cada concierto ha sido un homenaje a nuestra propia historia, recordando que Iron Maiden no es solo una banda, sino una bandera que hemos portado con orgullo durante cinco décadas.
- Slayer: El retorno de las tinieblas. Lo que empezó como un rumor terminó en incendios reales sobre el escenario. Su regreso a los grandes festivales nos recordó que el metal extremo sigue necesitando esa contundencia que solo ellos saben escupir, demostrando que el retiro les sentaba demasiado mal.
Los 10 discos de rock y metal que han marcado el 2025
Este año nos ha dejado una cosecha de lanzamientos que no solo han llenado las estanterías de las tiendas de discos, sino que han sabido conectar con nuestras emociones más profundas. Estos son los 10 álbumes imprescindibles que definen el sonido de 2025:
- Testament – Para Bellum (10 de oct): Elegido como el mejor del año. Un equilibrio perfecto entre la agresividad del thrash y momentos épicos, incluyendo una balada orquestal de más de siete minutos.
- Spiritbox – Tsunami Sea (7 de mar): La consolidación de Courtney LaPlante. Un disco que fluye entre la pesadez extrema y melodías frescas, evitando cualquier rastro de redundancia.
- Deafheaven – Lonely People With Power (28 de mar): Han logrado hacer digerible el black metal sin perder un ápice de su fuerza, con temas como «Magnolia» que ya son historia del género.
- Imperial Triumphant – Goldstar (21 de mar): Una locura vanguardista que mezcla jazz, disonancias y metal extremo. Solo para quienes buscan experiencias sonoras fuera de lo común.
- Dying Wish – The Flesh Stays Together (26 de sep): La nueva fuerza del metalcore. Un álbum que destaca por cómo Emma Boster explora profundidades emocionales sin perder la brutalidad.
- Sleep Token – Even in Arcadia (9 de may): El álbum de rock más vendido del año. Divisivo, atmosférico y cargado de electrónica, es el viaje sonoro que ha definido el 2025 para millones de personas.
- Rivers of Nihil – Rivers of Nihil (30 de may): Una lección de death metal progresivo. Mezcla brutalidad y tranquilidad con una experimentación compleja pero fascinante.
- Architects – The Sky, the Earth & All Between (28 de feb): Una evolución sin límites. Un disco «sin saltos» que empuja la voz de Sam Carter a nuevos límites.
- Avatar – Don’t Go in the Forest (31 de oct): Una sorpresa constante que se mantiene fiel a sus raíces pesadas. Un disco que hay que escuchar de principio a fin.
- Dream Theater – Parasomnia (7 de feb): El esperadísimo regreso de Mike Portnoy. Un álbum que recupera la magia de su época dorada con temas extensos y técnicos.
Despedidas y pérdidas en la escena: El silencio de los maestros
El 2025 nos ha obligado a decir adiós a figuras que no solo hicieron música, sino que construyeron el refugio en el que muchos de nosotros crecimos. Estas son las despedidas que más han dolido en la comunidad este año:
El último adiós al rock y metal nacional
- Robe Iniesta (10 de diciembre): El golpe más duro para el rock en español. La pérdida del «último gran filósofo» de nuestra música ha dejado un vacío inabarcable. Robe no solo era Extremoduro o su proyecto en solitario; era la voz de la autenticidad. Se fue en diciembre, dejando un legado que seguirá ensanchando el alma de quien lo escuche.
- Jorge Martínez (9 de diciembre): Solo un día antes que Robe, nos dejaba el líder de Ilegales. Jorge «Ilegal» fue el azote del rock nacional, un tipo directo, culto y valiente que mantuvo la dignidad del género hasta su último aliento en Asturias. Su partida marca el fin de una forma de entender el rock como una batalla constante.
- Xava Drago (agosto): La voz de Coda, fundamental para entender el hard rock melódico en español, también se apagó este año, dejando huérfana a una generación que hizo de «Aún» su himno personal.
Leyendas internacionales que nos dejaron
- Ozzy Osbourne (22 de julio): El «Príncipe de las Tinieblas» finalmente descansó. Tras una vida desafiando a la muerte, el padrino del Heavy Metal dejó este mundo poco después de un último intento de despedida sobre los escenarios. Sin él, el género simplemente no existiría tal y como lo conocemos.
- Ace Frehley (16 de octubre): El «Spaceman» original de KISS dio su último vuelo. Su estilo a la guitarra fue la razón por la que miles de jóvenes colgaron un póster en su habitación y decidieron empuñar un instrumento.
- Sam Rivers (18 de octubre): El bajista de Limp Bizkit falleció este otoño, una pérdida que ha sacudido profundamente a la comunidad del Nu Metal y a quienes crecieron con el sonido de los 2000.
- Brian Wilson (11 de junio): Aunque desde el pop, su influencia en la composición y la armonía del rock fue tan vasta que toda la comunidad ha rendido tributo al genio de los Beach Boys.
- Garth Hudson (21 de enero): El último miembro vivo de The Band. Su fallecimiento cierra definitivamente la historia de una de las agrupaciones más influyentes en la raíz del rock americano.
- Mick Ralphs (23 de junio): Miembro fundador de Bad Company y Mott the Hoople, una pieza clave para entender el Hard Rock británico de los años 70.
Festivales y conciertos de 2025: El rugido de las masas
El 2025 ha sido el año de los eventos de gran formato, con un claro protagonismo de Madrid y Barcelona para las giras de estadios, y un verano concentrado en tres grandes núcleos de festivales.
1. El evento de estadio del año: Iron Maiden
Sin duda, la cita más importante para el heavy metal en 2025.
- Lugar: Estadio Riyadh Air Metropolitano, Madrid (5 de julio).
- Impacto: Única fecha en España dentro de su gira «Run For Your Lives». Agotó las más de 50,000 localidades, celebrando los 50 años de la banda con un repertorio centrado en sus primeros álbumes.
2. Resurrection Fest (Viveiro, Lugo)
Celebró su 20º aniversario consolidándose como el festival de metal más grande de la península por volumen de asistentes (más de 130,000 en total).
- Lo más destacado: La presencia de Slipknot y Korn (en fecha exclusiva) marcó el techo de asistencia del festival.
- Aforo: Superó las 30,000 personas diarias en el recinto de Celeiro.
3. Barcelona Rock Fest (Santa Coloma de Gramenet)
Tras la incertidumbre de años previos, el festival de Can Zam se reafirmó como el gran punto de encuentro del heavy clásico en Cataluña.
- Lo más destacado: La actuación de Judas Priest y el regreso de Savatage fueron los momentos más comentados.
- Aforo: Se mantuvo en cifras superiores a las 20,000 personas por jornada.
4. Rock Imperium Festival (Cartagena)
Se ha convertido en el tercer «grande» en discordia, atrayendo masivamente al público al sur.
- Lo más destacado: Contó con Scorpions como gran reclamo de rock de estadios y a King Diamond para el público más especializado.
- Aforo: El Parque El Batel acogió a más de 20,000 asistentes diarios.
5. El adiós de Sepultura (Z! Live Rock Fest y salas)
Uno de los momentos más emotivos del año para la comunidad del metal.
- Contexto: La gira de despedida «Celebrating Life Through Death» pasó por España, destacando su paso por el Z! Live en Zamora ante más de 10,000 personas, además de fechas en salas de Madrid y Barcelona con el cartel de «Agotado».
Tabla comparativa de asistencia (Eventos >2.000 personas)
| Evento | Ciudad | Carácter | Aforo Estimado |
| Iron Maiden | Madrid | Concierto Único | +50,000 |
| Resurrection Fest | Viveiro | Festival | 32,000/día |
| Mad Cool (Día Rock) | Madrid | Festival | 70,000/día |
| Rock Imperium | Cartagena | Festival | 20,000/día |
| Barcelona Rock Fest | Sta. Coloma | Festival | 22,000/día |
| Leyendas del Rock | Villena | Festival | 15,000/día |
| Azkena Rock | Vitoria | Festival | 18,000/día |
Otras citas clave del circuito
Azkena Rock Festival (Vitoria): Con John Fogerty a la cabeza, se reafirmó como el evento de referencia para el rock de raíces y punk, congregando a cerca de 35,000 personas en el cómputo del fin de semana.
Leyendas del Rock (Villena): Sigue siendo el bastión del heavy metal nacional y europeo tradicional en agosto, manteniendo su fidelidad con unas 15,000 personas por día.
Pero también hemos vivido conciertos en salas que nos han hecho disfrutar de lo lindo como el de H.E.A.T el 23 de mayo que fue, sin duda, uno de los conciertos de hard rock más importantes del año en Madrid. No fue una fecha más.
O como no, el regreso de Y&T. Dave Meniketti volvió a demostrar por qué es una de las figuras más respetadas del rock. Tras años de incertidumbre por su salud, el regreso de Y&T en septiembre fue un triunfo absoluto de la nostalgia y la calidad musical.
El 2025 nos deja una certeza difícil de discutir: el rock y el metal no viven de la nostalgia, viven de la memoria. De esa memoria compartida que se activa cada vez que un riff nos devuelve a casa, que una voz nos acompaña en los momentos difíciles o que un concierto nos recuerda que no estamos solos. Ha sido un año intenso, a ratos luminoso y en otros profundamente doloroso, pero siempre honesto con lo que somos como comunidad.
Hemos celebrado regresos que parecían imposibles, nos hemos reconciliado con heridas abiertas durante demasiado tiempo y hemos visto cómo nuevas generaciones empiezan a escribir su propia historia sin complejos. También hemos aprendido, una vez más, que el tiempo no perdona, pero sí deja legado. Porque cada maestro que se va, deja un camino marcado para quienes siguen caminando.
Si algo nos enseña este 2025 es que el volumen puede bajar, pero nunca se apaga. Que mientras haya una banda dispuesta a subirse a un escenario y alguien al otro lado de la valla con los ojos brillando, el rock y el metal seguirán teniendo sentido. Y nosotros, aquí estaremos para contarlo.